Los 23 casos se encuentran en estudio en coordinación con el Centro Nacional de Microbiología (CNM), que cuenta con la técnica necesaria para confirmar o descartar el diagnóstico.
En general, la transmisión del «monkeypox» es respiratoria, pero por las características de los casos sospechosos en la región la transmisión apunta a ser por contacto con mucosas durante las relaciones sexuales.
En concreto, todos los casos en estudio son hombres que mantienen relaciones homosexuales. Las personas en estudio evolucionan positivamente y se encuentran aisladas en sus domicilios, aunque se debe mantener una vigilancia estrecha ya que pueden llegar a requerir ingreso hospitalario.
La viruela del mono es una enfermedad muy poco frecuente, que generalmente se presenta con fiebre, mialgias, adenopatías inguinales (inflamación en los ganglios), y erupción en manos y cara, similar a la de la varicela. No hay tratamientos ni vacunas específicas para ella.
La Dirección General de Salud Pública está a la espera del resultado de las pruebas de laboratorio y valorando el papel de la vacuna de la viruela para el control de la transmisión, así como el uso de antivirales de ser necesarios. También está realizando la investigación epidemiológica a los afectados e identificando a los posibles contactos, ha informado la Consejería de Sanidad en un comunicado.
El pasado 15 de mayo, Reino Unido lanzó una alerta sanitaria a la Organización Mundial de la Salud, de acuerdo al reglamento sanitario internacional, tras detectar los cuatro primeros casos en Europa.
Fuente: gaceta.es